¿Qué es la mediación familiar?

Es un proceso de tratamiento de conflictos en el que se cuenta con la ayuda de una tercera persona neutral que no ofrece soluciones, sino que facilita la comunicación entre las partes para que busquen conjuntamente soluciones que satisfagan a ambas partes.

Objetivo de la mediación familiar

Llegar a un acuerdo consensuado entre las partes, evitando el deterioro de las relaciones familiares y tratar de conciliar distintos intereses buscando soluciones.

Papel de la persona mediadora

La persona mediadora constituye una figura imparcial e independiente, cuya actuación es requerida, por iniciativa de las partes, a efectos de facilitar una comunicación entre ellas, proporcionándoles un procedimiento que permita alcanzar soluciones satisfactorias y amistosas a los conflictos existentes.

Tipos de conflictos a tratar

• Problemas de comunicación y convivencia entre los miembros de la familia: entre padres/madres e hijos/as, entre hermanos/as, etc.
• Conflicto o ruptura de pareja. Guarda y custodia de los menores, comunicación y visita de los menores, etc.
• Conflictos en el grupo familiar extenso. Dificultades originadas por el cuidado de familiares mayores o con discapacidad, disputas entre hermanos.
• Conflictos surgidos por causas de herencia o de negocios familiares.

Ventajas de la mediación

• Ayuda a afrontar los conflictos familiares y facilita la comunicación
• Favorece los acuerdos consensuados
• Minimiza los costes emocionales
• Evita judicializar las relaciones familiares.
• Reduce la hostilidad e irritabilidad.
• Ofrece un acuerdo adaptado a las necesidades particulares de cada familia.

“La paz no es la ausencia de conflicto, sino la presencia de alternativas creativas que nos ayuden a solucionar el conflicto”. -Dorothy Thompson